Monasterio de Nuestra Señora de la Sierra de San Calixto - Hornachuelos, Córdoba

Chary

Hay que ir expresamente con la idea de visitarlo y sin esperar encontrar algo mas, no es un lugar de paso, pero el paisaje serrano para llegar lo hace muy agradable, Un lugar cuidado y con historia, pude entrar en la iglesia aprovechando la oración de un monje. Lugar sereno y "no turístico ". Me alegré de ir , lo recomiendo.

Sonia O. B.

Es un lugar maravilloso e idílico donde los haya. Pero el personal de la hospederia no puede ser más mal educado y sin respeto ninguno. Había ido para escribir un artículo de turismo y alojarme en unos días en este maravilloso paraje, encontrar paz y conectar con mi espiritualidad. Pero lejos de eso, el personal laboral de este sitio deja muchísimo que desear. Nunca en mi vida me habían tratado tan mal. Desde luego les diré a todos mis conocidos que no vayan. Si no se sabe tratar al público que se vayan a coger aceitunas. Da igual que borren esta reseña. Mi artículo está hecho e imprimido y en unos días será publicado. Yo no vuelvo ni muerta.

Klos B.

Un entorno idílico, tranquilo incluso en fines de semana, aunque siempre hay algo de gente de paso. Retirado de todo, camino de ninguna parte, hay que ir expresamente. En primavera (si ha llovido) el entorno es precioso, así como carretera de llegada, ya sea desde Hornachuelos o desde Las Navas. Monasterio rodeado de las antiguas dependencias, hoy en parte habitadas y en parte destinadas al turismo rural. No conseguimos entrar a la Iglesia, si bien entiendo que debe haber algún horario puntual de visitas o de misas. Muy cuidado. Vale la pena parar un rato y dar un paseo. La parte del jardín de los cedros recuerda a la Toscana.

Diego (.

Si eres creyente es una visita obligada al Monasterio del Tardón Entras en la Iglesia de Ntra. Sra. de la Sierra esa sencillez de la parroquia con una paz y tranquilidad. Te impregnas de fé de la que hoy nos hace mucha falta.

Sr B.

Se llega por una sinuosa carretera de curvas desde Hornachuelos. El lugar es bonito, tranquilo y agradable para un paseo. No es grande y está plagado de senderistas los fines de semana. El monasterio está habitado por hermanas de clausura pertenecientes a las Carmelitas Descalzas. Allí venden los típicos dulces monásticos y algunas artesanías propias. Lamentablemente no pude ver su iglesia, ya que solo abren para la oración y culto. Recomiendo informarse antes de ir, ya que aunque el sitio sea bonito, venirse sin ver su interior no cumple el total de las .

MrF

Es lo que es, un convento de monjas en plena sierra, la paz y la tranquilidad te rodea, la carretera la apropiada para realmente interesados y aparta a los liantes. he comprado para colaborar a mantener ese lugar.

Juma K.

Fuimos en un pequeño grupo de 4 personas a visitar la iglesia y compra en el torno a las monjas, entramos a la sala de la casa espiritual en silencio viendo el recinto y un individuo exaltado se dirigió a nosotros sin la mínima educación ni respeto "que hacéis aquí, yo me meto en vuestra casa, fuera de aquí" siendo un hospedaje con comedor donde pretendíamos preguntar x el hospedaje.

Cristina

Una de las experiencias que no te puedes perder si pasas cerca de un convento de clausura. Comprar dulces de convento es una buena oportunidad para tomar contacto con estas mujeres a la que sus votos les impiden relacionarse visualmente con otras personas (aunque en algunos casos como las Carmelitas de Dos Hermanas, no recibieron brevemente en persona).

El sistema de compra se hace mediante un torno que permite cruzar unas palabras y realizar la transacción económica sin conocer de la otra persona más que su tono voz.

Antiguamente los dulces de convento eran un importante motor económico para este tipo de congregaciones, pero en la actualidad la falta de vocaciones se traduce en que, en muchos casos, el negocio se ha externalizado y los conventos son más bien puntos de venta.
En este caso, las tortas que compré se elaboran en un obrador de Sevilla, pero las mermeladas si que las hacen ellas, así que me llevé una de limón (nada barata la compra, todo sea dicho).

Estás monjas, más bien están especializadas en la confección de ropa de bebé y ropa de hogar de alta calidad. También realizan bandejas, cuadros, cestos y varios artículos de regalo.